Te pienso
- Angélica Peña
- 1 ago 2016
- 2 Min. de lectura

Cada vez que despierto y la luz del sol golpea mi rostro, tu eres lo primero que veo. Siempre que doy el primer sorbo de café, eres tú quien me acompaña. Cuando por alguna razón siento que el destino no confabula a mi favor, tu me consuelas. Sueles hacerme reír, enojar y llorar pero doy gracias por eso; porque me haces sentir viva y plena. Adoro cómo tu personalidad, tus chistes malos, tu cabello alborotado y como todo tu ser encaja perfectamente con el mío. Admiro tu libertad y tus ideales. Para mí el ser tuya es lo más hermoso que me ha pasado. Me agrada escuchar tus halagos cuando estoy arreglada, pero muero cada vez que, sin maquillaje, me besas y dices que soy la mujer más perfecta que existe. Tus brazos son mi hogar, y yo adoro estar en casa.
Todo es tan romántico, tan mágico, tan perfecto; pero es una lástima que ahora todo eso se esfume y se transforme en recuerdos, que mantienen a este cuerpo de pie pero que destruyen poco a poco mi alma. Duele no tenerte, pero duele mucho más saber que otra persona ahora goza de tu compañía; que tu amas a alguien más y que mi nombre se borró de tu memoria. Nuestros besos, nuestras risas, nuestras lágrimas, todo fue sustituido; ahora creas nuevos recuerdos mientras yo me ahogo en los nuestros, mientras yo intento rescatar lo que alguna vez tuvimos. Te pienso cada día de mi vida, eres la persona que me enseñó a ver la vida con otros ojos, con la que no tuve miedo de ser yo misma, la que me enseñó que el amor es el sentimiento más puro y bello que hay; te pienso aunque ya no pienses en mi. Te pienso cada noche, cada vez que me acuesto y no escucho tus "duerme bien mi princesa", cada vez que los problemas son tantos y tus brazos ya no están para calmarlos. Te pienso cada vez que abrazó la almohada buscando tu calor y me doy cuenta que tu perfume se esfuma cada día que pasa un poco más. Te pienso cuando sonrió porque me recuerda el timbre de tu voz y esas pequeñas arrugas que se formaban en tu frente.
Pero sueles estar más presente cuando lloro, porque es cuando más desnuda estoy, porque siempre tenías algo que me reconfortaba, y el saber que no estás y que todo mi mundo se a detenido, hace peor mi realidad. Sólo quiero que sepas que te amo como el primer día, y mi amor hacia ti nunca cambiará, a pesar de que tu ya hayas superado todo; a pesar de que yo ya no sea "tu princesa".
Comments